La mayoría de las mujeres crecieron en un mundo donde su sensibilidad fue vituperada. La mayoría de las mujeres crecieron creyendo que la mayoría de sus aflicciones no eran lo suficientemente importantes. Que el plano de lo sensible, de lo sentimental, de lo emocional, no tenía peso en la vida cotidiana. Que era ridículo que así fuera.

La mayoría de las mujeres, desde pequeñas, acostumbraron a no hablar de cómo se sentían si no lo hacían con otras amigas mujeres, con sus madres, sus tías, sus primas o sus abuelas. La mayoría de las mujeres sostuvieron entre sus manos pedazos de su corazón y sintieron el mundo caérseles encima.

Los alivios, o las salidas catárticas de todo esto, han sido similares en occidente. La conversación entre mujeres y el arte. Uno de los mejores géneros para ello ha sido, obviamente, la música. Así, haciendo uso de este formato, es que Blair comenzó a cautivar a un grupo de fanáticas. En su mayoría, son fanáticas, pero con gran presencia disidente y masculina este último año.

Blair, o la argentina Julieta Aylén Ordorica. Joven, muy joven (finalizó la secundaria en 2019) se ha metido en la escena porteña mediante canciones simples y perfectas de indie pop introspectivo confesional. Singles hechos para desengaños amorosos a medida para cada oyente.

Con su álbum Llorando en la fiesta (2022) rompió barreras que ni ella imaginaba y se valió de un gran reconocimiento a nivel nacional. Si a esto le sumamos sus impactantes shows en vivo, sólido concepto estético y colaboraciones con artistas como BB Asul, Odd Mami e Isla de Caras el resultado era previsible.

En tan solo cuestión de meses, la cantante oriunda de la ciudad de Punta Alta (provincia de Buenos Aires) supo ganarse un lugar de cercanía en el corazón de sus seguidores y esto fue notorio en su meteórico ascenso en la escena emergente argentina. Abrió el año en un Niceto Lado B en el mes de marzo, siguió con una serie de shows en Saldías y Niceto Club y hoy finaliza el 2023 con dos Niceto explotados de fanáticos, muchas presentaciones gratuitas colmadas, su nombre en carteleras de la talla de Cosquín Rock o Lollapalooza y el absoluto mérito y privilegio de poder decir que cantó en el escenario del Eras Tour durante las presentaciones de Taylor Swift en Argentina. Sucedió gracias a la invitación del telonero Louta para subirse a interpretar "Ayer te vi", tema que el artista lanzó en colaboración con Zoe Gotusso en 2018.

Este logro venía acompañado de una previa polémica debido a que, ni bien se anunció la llegada de Taylor en junio, se estaban juntando firmas para que Blair se encargara de cumplir el sueño de cantar en la apertura. Luego de una oleada de ferviente aceptación del público, la exposición comenzó a hacer de las suyas y generar opiniones enfrentadas acerca de si la cantante debería abrirle o no el show a su ídola.

Después de meses y en los días previos del primer show en River, cuando todo parecía resignación, Blair tomó un cuasi camino del héroe recibiendo la invitación de Louta a presentarse en la oportunidad más grande de su vida hasta entonces, y un hecho total de justicia poética frente al clima previo.

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En la previa de su primer Niceto de la semana del 12 de diciembre, LatidoBEAT conversó con la artista sobre su crecimiento vertiginoso, la madurez obligatoria que trajo consigo y sus deseos a futuro para su carrera.

Si tuviese que elegir a tres mujeres que admira, y que para ella son referencia, se refiere enseguida a Patti Smith, a Lana del Rey y a la escritora argentina Mariana Enríquez.

Así como ella elige a estas tres referentes culturales cada día se suman más y más adeptos conquistados por auténticos himnos de soledad y desencanto como “Mi suerte”, “Rothmans” y “Yo & yo” y una propuesta visual que remite a la idea de femme fatale combinada con la estética de scream queen, salida de un slasher retro. Argentina está cayendo rendida a sus pies.

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Femme fatale: es un personaje típico, un arquetipo de la literatura y el arte, de una mujer misteriosa, hermosa y seductora cuyos encantos atrapan a sus amantes, llevándolos a menudo a trampas mortales y comprometedoras. 

Scream queen: Término que se utiliza específicamente para referirse a los personajes de "jóvenes y atractivas damiselas en apuros" que han aparecido en varias películas del género de terror.

Slasher (retro): Un videojuego de terror de supervivencia de 8 bits inspirado en los juegos de computadora y las películas de terror de los años 80.

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En marzo te estabas presentando en Niceto Lado B y hoy estás frente a dos Niceto grandes colmados de gente. ¿Qué sentís sobre de este crecimiento en tan solo un año?

Yo diría que siento motivación e intriga acerca de cómo va a seguir creciendo esto. En marzo en Niceto Humboldt (Lado B) eran 200 personas. En ambos Niceto Lado A la capacidad es de 900 y tenemos dos fechas repletas. Eso es una locura. Además, ahora viene el Lollapalooza, el Cosquín Rock, todos los festivales en los que ya estuve… Solo queda decir: “si en tan solo un año pasó esto, ¿qué esperar entonces del resto de los años?”.

Al ser todo tan centralizado en Buenos Aires cuando se trata de música, festivales, venues, etc., y frente a la necesidad de crecer y tocar en las distintas oportunidades, ¿cómo fuiste manejando estar a más de 600 kilómetros de distancia de la capital, en la ciudad de Punta Alta?

Lo bueno es que los contactos y los amigos ya los tenía acá en Buenos Aires y no fue venir y hacerme de cero, sino que ya contaba con colegas con los cuales hablaba. Siempre que venía, alguien me daba una mano y fue más fácil el proceso de acercarme acá. Siempre a pulmón, haciendo vaquita para poder venir a cada fecha a tocar hasta que todo fue creciendo lo suficiente para que yo pudiera mudarme a CABA. Es difícil, pero afirmo que se puede si le ponés onda.

¿Sabrías detectar cuál fue el momento o el acontecimiento exacto en el que tu carrera despegó?

A grandes rasgos el Niceto Lado B impulsó bastante porque fue la presentación del disco. Salió en noviembre del año pasado y, hasta marzo, no veía que explotase demasiado en repercusión. Las chicas vinieron, vieron el show, la estética, mi energía con la banda y eso fue un disparador. Ahí empezaron a subir videos a las redes sociales y después del show gané un montón de seguidores. La verdad que esa noche hizo que todo se difundiera más. Y también todo lo que pasó con Taylor Swift. Muchas personas me dicen, “te conocí por Taylor Swift” lo cual es loquísimo. Imaginate explicarle esto a mi yo de hace dos años, no entendería nada.

Durante todo este vertiginoso y rápido crecimiento, ¿en qué aspectos tuviste que madurar de golpe, respecto a la industria musical y tu carrera?

Siento que aprendí a no ventilar tanto. Es un arma de doble filo porque mucha gente se vio atraída a mi música y a lo que soy yo por cómo interactuaba en las redes. Pero llega un punto que juega en contra porque la gente al verte tan cercana siente que tiene el derecho de poder rebajarte diciéndote, “vos no sos una artista de verdad, si estás todo el día acá en Twitter”. Yo siempre veía a gente famosa siendo súper reservada, un claro ejemplo es Taylor, quien después de todo el bardo con Kim Kardashian se volvió muy reservada. A veces uno no lo entiende y reclama más interacción, pero pasa el tiempo y te vas curtiendo y dando cuenta que es por eso. Por ahí decís, “el cielo está lindo hoy” y la gente te mata por eso.

Más allá de que se describa a tu música como indie pop o pop alternativo, este año fuiste tomando rumbos más rockeros en los singles. ¿Te ves probando con otros géneros o estilos incluso a nivel performático en un futuro próximo?

Yo sueño un show en el que pueda tocar la guitarra un montón de canciones, o los sinthes, y el piano. Me siento en mi casa y me pongo a ver videos de Charly tocando a dos sinthes y digo, “yo quiero hacer eso”. También me encantaría lograr algo muy hipnótico de ver, sumar bailarines y cosas medio extrañas porque es bastante difícil al no ser totalmente rock ni totalmente pop. Me pregunto cómo podría lograr todas esas cosas o cómo meto bailarines con estas canciones. Pero creo que todo es una cuestión de verlo o delegarlo con alguien más. Así que, sin dudas, mi meta es hacer un show que haga que el boca a boca incite a la gente a decir, “che tenés que ir a ver este show porque es tremendo”.