El debut que se ve, el que conoció el público, fue en noviembre de 2019. En ese entonces, Pedro Dalton (vocalista de Buenos Muchachos y la banda argentino-uruguaya Chillan Las Bestias) y Luciano Supervielle (solista, miembro de Bajofondo y ex Plátano Macho) abrieron el festival Primavera 0 en el Teatro de Verano montevideano, donde tocó Patti Smith. 

A ese show le pusieron Con un montón de ojos sobre la cabeza y consistió en lecturas de poesía por parte de Pedro, con musicalización de Luciano. Pero el origen de todo esto no fue aquel. Empezó, en realidad, cuando Juan Casanova los presentó personalmente en el Bar Michigan de Malvín. Un tiempo después, tocaron en uno de los conocidos shows llamados Enlaces que, en ese entonces, no tenía ese nombre. 

"Fue el primero de todos, aquel que no se llamaba Enlaces todavía. No teníamos nombre, era cuando estábamos batallando todo aquello del no a la baja de imputabilidad para la prisión", cuenta Pedro Dalton sobre ese primer show en el Teatro de Verano. Luego, participaron de otro show reducido de ese gran grupo y "ahí ya tocaba yo con Luciano. Fue como el primer encuentro musical con él".

"Lo que sucede en Enlaces es que hay un momento en el que con Luciano hacemos 'Mi rincón' a piano y voz, y es como el primer contacto que tenemos los dos, mano a mano, y es medio amor a primera vista", confiesa Dalton sobre el comienzo de esa fusión musical. 

Y, aunque musicalmente no volvieron a encontrarse después de un tiempo, "cuando me proponen recitar poesía en Patti Smith, lo primero que me viene a la cabeza fue él", dice Dalton.

Este 24 de noviembre, se estarán volviendo a presentar en dúo, Luciano y Pedro, Pedro y Luciano, en La Trastienda. Las entradas pueden adquirirse a través de este link. Desde LatidoBEAT hablamos con Pedro Dalton no solo de música, sino también de libros de poesía y un trío musical del que participa, también, Juan Casanova.

Foto: Javier Noceti

El debut de ustedes como dúo se llamó Con un montón de ojos sobre la cabeza. Además, tenés un libro de poesía que se titula así. ¿Por qué ese nombre?

Medio que tenía que resolverlo rápido y me pareció que estaba bueno, ya que tenía que recitar poesía, utilizar el nombre del libro. Me parecía que tenia punch. Yo tenía el dibujo ya armado, la gráfica, para poder hacer eso. Y fue lo que hice. Le pregunté a Luciano si le parecía que estaba bien eso y le encantó a la idea, así que quedó eso.

¿Por qué se titula el libro así?

Es Cuatro libros de poesía y un montón de ojos sobre la cabeza. Yo le había puesto "Cuatro libros de poesía y un montón de ojos en la cara" por ese dibujo que había hecho. Hice primero el dibujo y después le puse el nombre. Me pareció que estaba bueno como ilustración para poner en la tapa del libro. Martín Fernández, de HUM y Estuario, me dijo que tenía que ser en la cabeza y quedó así.

Cuando empezaron con esto, en Primavera 0, y después siguieron con shows en La Trastienda, todo aquello se trataba de cierres y de contenerse en la música juntos, ¿eso sigue siendo así? 

En aquel momento había una situación muy delicada, que era lo que estaba atravesando Luciano con la mamá de sus chicos. En esa parte emocional estábamos súper juntos y era con la persona con la que estaba trabajando más. Nos juntábamos dos veces por semana. Empezamos en junio para llegar a noviembre, a dos veces por semana, e incluso hubo meses que fueron más. Estábamos muy conectados emocionalmente porque estaba muy compenetrado en esa obra que estábamos generando. Las composiciones nuevas, cómo meterlas.

Al final, terminó siendo todo inédito. Con respecto a nuestra relación, tuvimos que, en esa cantidad de meses, entendernos musicalmente. Nos mostrábamos cosas que nos gustaban a cada uno para ver cómo podíamos fusionar eso que queríamos hacer y fue un laburo alucinante. Todas las mañanas esas de martes y jueves, a las 9:30 de la mañana, de charla, café, componer y componer y componer. Nos hicimos muy amigos, fue como muy profundo. Eso sigue sucediendo, en cierta manera. No estamos con esa cantidad de tiempos, ni de tiempo juntos, pero eso quedó sellado. Ahora, nos vemos y hablamos de lo que tenemos que hablar y ya sabemos todo el resto. 

Además de aportarse a nivel personal, se aportan a nivel musical. ¿Qué te da Luciano a ti que no tengas, a nivel musical, y qué le das tú a Luciano que él no tenga?

Nosotros venimos de palos diferentes. Yo soy muy rockero, muy punk, y vengo de esa escuela de lo puramente emocional. Luciano es una persona que toca partituras y sabe tocar el piano clásico. Tiene una parte muy fuerte en su personalidad relacionada al hip hop. Está mucho más vinculado con lo tecnológico que yo. Entonces, es una fusión alucinante porque en el momento de buscar cosas para poner de percusión y para poner en la música. Vamos a viejos programas rusos de percusiones, donde suenan latas, y fierros, y cosas, para poner en la música y ahí se le abre un mundo nuevo a él como a mí también. 

Foto: Javier Noceti

¿Por qué creés que eso suena bien? Podría ser muy disonante también.

Porque creo que los dos somos grandes amantes de la melodía, por ejemplo. Es algo que se da en los dos y nos gusta mucha música, somos gente medio abierta. De hecho, el que le propone poner el Claro de luna de Beethoven debajo de una poesía, soy yo. Y la termina tocando y todo ese mundo clásico me lo muestra. Luciano debe ser el músico más completo con el que yo toco. Toca clásico, que para mí es una cosa que es imponente y nos entendemos muy bien. Suena bien, no sé por qué. Porque las cosas que elegimos, evidentemente, a nuestra música le hacen bien. 

El show se está presentando como Pedro y Luciano, y ya no como Con un montón de ojos sobre la cabeza, ¿por qué?

Porque Con un montón de ojos en la cabeza es un show en sí mismo. Es el show que hicimos antes de Patti Smith. Nosotros, cuando tocamos, siempre lo repetíamos. Lo que hacíamos era tocar, era leer esa poesía que se transforma en canción. Son cuatro canciones con cuatro poesías. Con sonidos abajo y todo eso, generando un solo misterio. Después, de ahí, cortábamos y tocábamos las canciones. "No soy un extraño" de Charly (la versión de Luciano Supervielle), "Antenas Rubias" de Buenos Muchachos, "A dónde van los pájaros" de Supervielle. Así era nuestro show antes. Y eso lo dejamos de hacer. Ahora pusimos las cuatro canciones que nosotros compusimos, las ponemos entreveradas en todo el resto y ahora es un show de canciones. 

Hace no tanto hicieron Suma Camerata, que es de a tres. ¿Cómo cambia ser dos?

Son tres personalidades las nuestras. Está Juan Casanova, que tiene una personalidad, Luciano otra y yo otra. Y la diferencia es esa, que ahí en Suma Camerata somos tres personas y acá somos dos. Y ahora el 24 de noviembre vamos a cerrar con un cuarteto de cuerdas de Matías Craciun, con el que también tocamos en Suma Camerata, pero tocamos de otra manera. Suma Camerata es algo más de mayor producción, de mucho cuidado en muchas cosas, tratando de generar un show. Lo que hacemos con Luciano es más un toque, para que se entienda la diferencia. Con Luciano hacemos canciones y con Suma Camerata creo que seguimos un guion, es la diferencia.