Escribe Joaquín Alonso | @joacc_

Se cumple medio año de la “muerte” de Dylan León Masa, conocido también como Dillom, el músico argentino que presentó su último álbum, Post Mortem, con un falso velorio el pasado 1.º de diciembre de 2021.

La noche está fresca y hay casi tres cuadras repletas de personas rodeando a la Sala del Museo del Carnaval. La gente está ansiosa. Llegó a Montevideo uno de los raperos latinoamericanos más influyentes de estos últimos años.

Son las 21:00 y las puertas comienzan a abrirse, permitiendo así el ingreso de más de mil espectadores que inundan el recinto en busca de un lugar para ver al artista argentino.

Media hora después, la gente se asienta y comienzan los cánticos característicos del público uruguayo, pidiendo a gritos la salida de Dylan. Pero para asombro de la mayoría, este tenía una sorpresa preparada para su público: dos teloneros.  

El primero en subir al escenario es el rapero uruguayo “Knak”, que moviliza a los espectadores con varias de sus canciones como solista. Después de su presentación solitaria, sube también “Davus” y juntos cantan varias canciones; mientras los espectadores entran en calor para el evento principal de la noche.

Las luces de la Sala se apagan y pasa lo que todo el mundo espera. Los músicos suben al escenario con dos percusiones, una guitarra, un bajo y un teclado. Empieza a sonar la instrumental de “Post Mortem” y al inicio del verso aparece Dillom por el costado del escenario saltando con los más de mil espectadores al ritmo de la música.

Joaquín Alonso

El calor invade la pista, la gente eufórica canta cada uno de los temas que compuso el joven argentino de 21 años. No hay nada que criticarle a Dylan sobre su performance en el escenario. Durante el show demuestra estar preparado de antemano y cumple satisfactoriamente con los estándares de la gente. Dillom hace bailar, cantar, gritar y emocionar a cada una de las personas que están en su concierto.

Cuando Dillom toca “Casi Pegado” la sala vibra. Los espectadores saltan, quedan atónitos con el compromiso y pasión de la gente.

Llega el momento de que el argentino anuncie la última canción y entre el público reina la decepción. Sin embargo, es tiempo de dejarlo todo, suena “Opa”, la canción de la que Dillom tiene dos versiones, una para todo público y otra para mayores de edad; la misma que cuenta con un potente instrumental y que en la noche de este jueves deja boquiabiertos a los espectadores.

La música termina. La gente comienza a retirarse y la banda deja el escenario. Dicen por ahí que más de una persona logró llevarse una foto con el artista argentino que de seguro se fue orgulloso de la pasión que le demostró el público uruguayo.

Ya estamos esperando el regreso de Dillom, para que otra vez deje la vida.

Joaquín Alonso