Por Fiorella Benavides | @fiorellabenavides_

Los dientes de una mujer son objetos encantadores para verlos solo en un sueño o en el amor.

—L'Étoile de mer, Man Ray (1928). 

La atmósfera de misterio y seducción es parte de la narración de L'Étoile de mer (1928), una de las películas más conocidas que realizó Man Ray (1890, Philadelphia - 1976, París), a partir de de un poema de Robert Desnos (1900 - 1945, París). Allí aparecen componentes eróticos que transcurren a través de conceptos canónicamente surrealistas. Este corto fue el que abrió una de las veladas de febrero de cine en el MACA (Museo de Arte Contemporáneo Pablo Atchugarry), en el marco del ARCA (International Festival of Films on Arts).

La escena se despliega con una mujer, Kiki, emergiendo en la penumbra. Su figura borrosa se mueve con gracia mientras una pareja atraviesa el encuadre. Sus pasos los llevan a un lugar de escaleras y siluetas enigmáticas. Con gesto melancólico, comienza a desvestirse mientras su acompañante se despide.

Es que, para celebrar el centenario de la primera película de Man Ray en 1923, Return to Reason, el pasado 9 de febrero el MACA proyectó la primera restauración en 4K de las películas mudas de culto de Man Ray, con una nueva banda sonora compuesta e interpretada por Sqürl, la banda del cineasta Jim Jarmusch (1954, Ohio) y Carter Logan, productor audiovisual.

Incluyendo Le Retour à la Raison (1923), Emak-Bakia (1926), L’Étoile de mer (1928) y Les Mystères du Château du Dé (1929), Return to Reason es un viaje al mundo surrealista y onírico de uno de los artistas visuales estadounidenses más reconocidos.

"Debe ser una restauración difícil de abordar porque parte de la veta y el desgaste, en realidad, añaden textura", decía Jim Jarmusch en una entrevista para Deadline en mayo de 2023, sobre el desafío de restaurar las películas de Man Ray.

El cineasta y músico de Only Lovers Left Alive (2013) y Stranger Than Paradise (1984), es de esos personajes tan particulares con la música que a sus 70 años, y a lo largo de las décadas, ha reclutado a RZA, el líder de la banda Wu-Tang Clan, para para componer en 1999 la banda sonora de la película Ghost Dog: The Way of the Samurai.

En 2003 hizo que Tom Waits e Iggy Pop fueran protagonistas de Coffee and Cigarettes,  y consiguió que Neil Young rasgara una guitarra improvisada para la banda sonora de Dead Man (1995). Sin mencionar que sus películas cuentan con turnos de actuación de todos, desde Joe Strummer hasta Screamin' Jay Hawkins, y dirigió un documental sobre los Stooges.

Salvador Dalí y Man Ray en París, el 16 de junio de 1934. Foto: Carl Van Vechten.

Jarmusch, conocido por su estilo distintivo y su fascinación por lo inusual, conversaba con la hija de su amigo, Jean Labadie, sobre su pasión por el cine. Fue entonces cuando la joven sugirió los cortometrajes de Man Ray, reconocido artista visual estadounidense y experimental autodidacta, como una fuente de inspiración. La historia de esta dupla improbable se remonta a un encuentro casual hace quince años.

Sorprendido por la audacia de la sugerencia, Jarmusch aceptó el desafío de explorar este territorio desconocido pero familiar que le significaba Man Ray. Para él, la clave estaba en no eliminar nada, sino en acercarse lo más posible al material original. Esta conversación, que tuvo lugar hace aproximadamente quince años, marcó el inicio de una colaboración creativa sin precedentes.

Hijo de padres judíos que emigraron a Nueva York, su madre costurera y su padre trabajaba como sastre. Si bien rechazó la educación tradicional, Man Ray logró ser un gran influyente para los movimientos dadaístas y surrealistas. Pintor, diseñador de joyas y lámparas, cineasta. Todo eso fue Man Ray. Y más. Conocido en el mundo por su fotografía avant-garde, sus procesos experimentales como la fotografía sin cámara y el uso de elementos prácticos y físicos como botones, rollos de tela, cuellos de camisa, objetos que estaban a su alrededor y que eran parte de su cotidianidad.

Llegó a vivir en una especie de comuna en Nueva York, con un colectivo de artistas en el norte de Nueva Jersey a principios del siglo XX. Trabajó haciendo dibujo mecánico, intentando vender pinturas, pasando desapercibido.

Años después, Jarmusch y Carter Logan, compañeros de banda de SQÜRL, se sumergieron en el mundo surrealista de Man Ray, explorando cada fotograma en busca de inspiración. Su objetivo era crear una banda sonora que capturara la esencia del surrealismo y la llevara a nuevas alturas de expresión. Con guitarras distorsionadas, sintetizadores Moog y una mezcla ecléctica de sonidos, lograron crear una experiencia auditiva que es al mismo tiempo inquietante e hipnótica.

SQÜRL se inició en 2009, cuando Carter y Jarmusch se asociaron con el productor e ingeniero de sonido Shane Stoneback para componer la música de la banda sonora de The Limits of Control (2009) la película que Jarmusch rodó parcialmente en lugares de España. Una ambientación psicodélica tejida a base de guitarra eléctrica y batería que firmaron como Bad Rabbit.

Jim Jarmusch y Carter Logan, de SQÜRL

Poco después cambiaron el nombre por SQÜRL y grabaron una serie de EPs experimentales con guitarras distorsionadas, música que aparece en su filmografía desde su debut rodado a principios de los ochenta titulado Permanent Vacation (1981), interpretada por el artista y músico de los Lounge Lizards John Lurie.  

Man Ray en París, 1975. Foto: Lothar Wolleh.

Protagonistas de eventos musicales como All Tomorrow’s Parties, Primavera Sound o Big Ears Festival, SQÜRL publicó en el 2023 su primer LP producido por Randall Dunn, responsable del sonido de algunos trabajos de Sunn O))), Boris, Earth, Thurston Moore, Zola Jesus o Marissa Nadler. 

Silver Haze ,ese primer LP, cuenta con las colaboraciones de Charlotte Gainsbourg, Anika y Marc Ribot en ocho cortes. En su apertura instrumental, "Berlin '87", nos trasladamos al entorno underground de la capital alemana previo a la caída del muro con un sonido envolvente y atmosférico, guitarras distorsionadas que se apoderan del ambiente, hasta llegar a "Silver Haze", el broche de oro para finalizar con esta pieza de casi siete minutos de post-rock y ambient electrónico, empapado en distorsiones que gritan "esto es SQÜRL".

"Estamos perdidos para siempre en el desierto de la eterna oscuridad", manifiesta Man Ray en L'Étoile de mer. Una mujer camina, se desviste y se tira en la cama mientras se escuchan los sonidos de una batería, marcando el compás. Las palabras escritas en la pantalla, "Bella como una flor de carne", evocan una sensación de extrañeza que se intensifica con la música de SQÜRL. 

El paisaje se transforma en una sucesión de imágenes abstractas y sonidos espaciales en Emak Bakia. Una mujer conduce un auto mientras la música se intensifica, creando una sensación de anticipación y movimiento. Las luces y sombras danzan al ritmo de las olas del mar, mientras una guitarra distorsionada se hace presente.

Figuras geométricas se superponen una sobre otra, creando un efecto hipnótico y desconcertante. Una sonrisa irónica se dibuja en el rostro de una mujer en la pantalla, mientras la música distorsionada se fusiona con las imágenes en constante transformación.

Sin embargo, en Les Mystères du château du Dé, un auto se acerca en la oscuridad, el misterio y la intriga se entrelazan mientras una pareja juega a los dados en un castillo abandonado. "¿Vamos o no vamos? ¿A dónde vamos?". La música con sus sonidos oscuros y atmosféricos, agrega una capa adicional de tensión a la narrativa, llevando al espectador a cuestionarse con una pregunta humana: ¿dónde estamos?

 La pantalla se llena de movimiento y luz, con tambores marcando el compás y alfileres golpeándose en Le Retour à la raison. Una fotografía de Kiki Montparnasse, la musa de Man Ray, recostada en una pose sugerente y un juego de luces y sombras sobre un torso femenino desnudo contiene el desarrollo de una situación. Platillos se suman al sonido, creando una sinfonía visual y auditiva que transporta al espectador a un estado de trance.

La banda sonora, una sopa sónica de guitarras distorsionadas y retroalimentación en bucle, grabada para acompañar las películas, es un viaje alucinógeno. Jim Jarmusch y Carter Logan buscaron crear una experiencia "inspirada en la psilocibina", como mencionó Jarmusch a IndieWire en mayo de 2023.

Esta colaboración entre dos visionarios creativos nos invita a desafiar nuestra percepción a través del arte desconcertante de Man Ray. No se trata de que SQÜRL nos diga cómo debemos sentirnos sobre las obras del surrealista Man Ray, sino que "simplemente debemos volver a una forma razonable de apreciar la imaginación", dijo a Deadline.