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Contenido creado por Sofia Durand
Música
Cowards

Louis Borlase, de Squid: “Quisimos divertirnos con la idea del mal, aunque sea delicado”

El guitarrista de la agrupación inglesa conversa sobre el proceso creativo del álbum que lanzarán este 7 de febrero.

03.02.2025 15:52

Lectura: 12'

2025-02-03T15:52:00-03:00
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Por María Road

Londres fue el escenario principal del desarrollo de muchas bandas imborrables en la historia del rock y otros secretos de culto que fascinan al público. Desde la efervescencia punk de The Clash y los Sex Pistols, la épica inigualable de Queen y Led Zeppelin o el sensacionalismo favorito de la prensa musical durante los noventa que fueron Blur y Suede. Todas ellas construyeron su recorrido entre sus calles tan húmedas como encantadoras.

Un poco distante de la urbe característica y en el distrito sur, específicamente en Brixton, se encuentra una sala musical que se convirtió en el caldo de cultivo de una escena musical vanguardista que dio la nota durante los últimos cinco años. Se trata del Windmill, una sala de conciertos que se jacta de ser la cuna de varias bandas que impactaron a la prensa y el público desde 2018, como Black Midi, Black Country, New Road, Shame y Squid.

Esta última banda está formada por Ollie Judge (batería y voz), Anton Pearson (guitarra), Arthur Leadbetter (teclado), Louis Borlase (guitarra) y Laurie Nankivell (bajo) y se valió de interesantes presentaciones en vivo y dos discos como Bright Green Field (2021) y O Monolith (2023) para ser considerada como uno de los proyectos más sobresalientes de la nueva generación musical inglesa. Si bien son oriundos de la ciudad de Brighton, fue en la comunidad windmillera que encontraron su público y fuente de crecimiento gracias a su estilo que oscila entre el post punk más arty, el post rock y el rock experimental.

Luego de varios años intensos y algunas giras, una de las cuales los acercó a Sudamérica en mayo de 2024, el presente del conjunto es de madurez absoluta frente a la salida de su tercer disco de estudio, Cowards, próximo a presentarse este 7 de febrero vía Warp Records. De este LP ya salieron dos singles: "Crispy Skin" y "Building 650", que adelantan a la perfección el espíritu maníaco, escapista y humano que caracteriza a esta nueva obra.

Foto: Harrison Fishman

Foto: Harrison Fishman

En "Crispy Skin" —como ya es buena costumbre de la banda— lo digital se entrelaza orgánicamente con el rock de guitarras. El ritmo frenético invita a la euforia característica de la banda que se equilibra con una melodía dulce y melancólica. "Building 650" dibuja arabescos con la guitarra que, al fundirse en las notas del violín, pincelan a la perfección la tristeza y desesperación urbana.

El trayecto a lo desconocido comienza con el tercer track: "Blood on the Boulders". Sugestivamente tribal, se convierte en una balada casi teatral y medieval cuya intensidad aumenta y desciende constantemente. "Fieldworks" y "Fieldworks II" funcionan como un espejismo, comenzando por una balada psicótica que en momentos entra en un trance de ensueño y desembocando en su parte 2, caracterizada por la dulzura y delicadeza que aporta el sonido único del violín.

El punto más alto del disco es "Cro-magnon Man". La guitarra y sintetizador juegan de manera hipnótica y lúdica mientras que los coros encantadores se traslucen entre el ruido y los efectos perfeccionados en producción. La fantasía es constante y genera un clima tan bailable como sugestivamente paranoico. En "Cowards", el tema que nombra el álbum, todo se torna mucho más ambiental y ciertamente psicodélico. Este pasaje introspectivo desemboca en una balada donde los vientos y cuerdas acompañan armoniosamente. "Showtime!" sigue por esa misma línea con un ritmo atrapante que cobra mucha más velocidad a lo largo del tema, incrementando una divertida paranoia. "Well met (Fingers Through The Fence)" concluye el LP con fragilidad envuelta en pasajes instrumentales cambiantes.

Cowards desde su concepción explora la maldad humana en sus diferentes formas. Esto surgió desde la observación de la cotidianeidad y los hechos que los afectan día a día, así como también de referencias ficticias que se fueron entrelazando. Louis Borlase, guitarrista, explica cómo dieron a luz este álbum. Desde las influencias, hasta la elección del productor. 

Foto: Harrison Fishman

Foto: Harrison Fishman

“Tiene mucho que ver con usar ese tipo de ejemplos del mal, las malas acciones y la inmoralidad que ves en la ficción, en los libros, y en cierto modo buscar versiones de eso que existen en la vida real. Buscamos tener una especie de escala móvil entre lo real y lo imaginario, básicamente usando ejemplos de lo que vemos a nuestro alrededor y en la calle. Puedes ver mucho de este mal en las películas, pero al mismo tiempo piensas: ‘Esto realmente me recuerda algo que ha sucedido en mi propia experiencia personal’. Es un tema difícil y delicado del que hablar, pero también queríamos divertirnos con él”, explica Louis Borlase, guitarrista del conjunto.

Dentro de esas referencias ficticias se encuentra la novela Cadáver Exquisito (2017), de la autora argentina Agustina Bazterrica. Y no fue el único libro que sirvió como referencia para la exploración de los grotescos de la realidad de este disco. Borlase también menciona a De repente llaman a la puerta (2010), un libro de historias cortas "increíbles", de Etgar Kerret, y Matadero Cinco (1969), de Kurt Vonnegut. En el plano cinematográfico, cita a A diente de perro (2021), de José Luis Estañ y Larga jornada hacia la noche (1962), de Sidney Lumety. 

Dentro de la cotidianeidad de una banda se encuentran los meses llevando a cabo una gira, como fue el caso de Squid durante buena parte del 2024. Los hoteles se convierten en hogares transitorios y la rutina día a día va mutando según la cultura de la ciudad en la que se encuentren. Sobre la extrañeza que esto por momentos genera, Louis dice: “Todas esas ciudades las vivenciamos desde una perspectiva de asiento trasero. Estás allí viviendo el momento y para actuar y tocar música, pero puede ser muy fácil sentirse como un extraterrestre. Se trata de nuevas culturas en las que no necesariamente sientes que sabes cómo navegar por ellas y encontramos mucho de esa sensación en Japón".

Al respecto, Louis vuelve a las referencias y cuenta que "Building 650" se inspiró en Sopa de miso (1997), de Murakami, un libro que Ollie estaba leyendo en el avión cuando volaban a Tokio por primera vez.

"Ese tipo de soledad en las grandes ciudades y de hacer una gira todos juntos realmente se sintió bastante. Fue algo que queríamos explorar, esa idea de ser una especie de turista, pero una especie de turista emocional porque estás un poco fuera de tu zona de confort y en una cultura muy desconocida para ti, así que es algo bastante inspirador ir a estas ciudades. Siempre que viajamos deseamos poder quedarnos más tiempo ya que sentimos que podemos dar más, pero luego al día siguiente tienes que irte de nuevo, así que es algo bastante extraño pero inspirador”, reflexiona el guitarrista. 

The Church es un estudio situado en Crouch End, al norte de Londres. Se trata de una antigua iglesia que se remodeló para darle lugar a este estudio de grabación por el que pasaron desde U2, hasta My Bloody Valentine. Fue el sitio elegido para la grabación de Cowards, en el cual ya trabajaron anteriormente en una oportunidad. 

"Nos encantó la sala de inmediato, era muy reverberante, es un entorno ideal para grabar cosas que resuenan de una manera particular, como baterías, voces y cosas que requieren espacio para tener carácter y sentir que realmente cobran vida en una sala como esta, que es una vieja iglesia. Se sintió un desarrollo sonoro natural para nosotros en términos del tipo de sala así que grabamos todo allí junto con todas las guitarras en salas separadas para que pudiéramos escuchar las notas morir a su propio ritmo, nunca antes habíamos hecho eso”, explica Borlase.

Un dato que aporta a la aventura post rock del conjunto de Brighton es que este álbum fue mezclado por John McEntire, de Tortoise, un reconocido conjunto del género. Louis afirma que siempre fue un gran fan de la banda, y que se los presentaron cuando trabajaba en una tienda de guitarras de Bristol. 

“Después de la grabación de nuestro álbum anterior, O Monolith, estábamos un poco perdidos en cuanto a quién pedirle que lo mezclara. Pensamos que queríamos que alguien más lo hiciera y escuchar un estilo de mezcla diferente al de Dan [Carey], con quien siempre trabajamos. Pensamos que tal vez John era una buena opción porque había mezclado mucho del material de Stereolab y todo ese estilo. En bandas como The Sea and Cake nos encanta la forma en la que suena la guitarra y los elementos electrónicos en todas esas grabaciones, que son tan características y únicas”, agrega Louis. 

Otro detalle que une a Tortoise y Squid es que durante su primera gira sudamericana en mayo 2024, coincidieron en espacio tiempo y ambas bandas tocaron en Niceto Club en Buenos Aires en la misma semana. Borlaise lo define como "una locura", ya que los consideraron siempre como una "gran inspiración". “Llegar a Argentina por primera vez y ver una banda a la que admiras tanto tocando en el mismo lugar que tú es un momento muy extraño, hasta quieres pellizcarte”, recapitula.

¿Que recuerdan de Argentina? Es lo que muchos fanáticos se preguntan. Su paso por Buenos Aires dejó a pocos indiferentes y su show en Niceto reafirmó el fanatismo de propios y conquistó el de extraños, mientras conocían aspectos propios de Argentina como su comida y su cotidianeidad urbana.

“No puedo recordar el nombre de los sándwiches que comimos, pero la comida del día del espectáculo o la callejera estaba increíble, disfrutamos conocer un poco de la comida de Argentina. Y el público es increíble, recientemente vi en YouTube una grabación de nuestro show en Niceto y la audiencia fue increíble. Siempre es muy alentador ver al público responderte así en un lugar en el que nunca has estado antes, te hace sentir un pequeño aumento de confianza. Noté que todos lo disfrutaron, escuchando atentamente en los momentos tranquilos y disfrutando de hacer un poco más de bullicio con los momentos ruidosos”, recuerda.

Dan Carey es la mano artesana detrás de buena parte de toda la generación acuñada como "escena post-Brexit". Es el fundador del sello Speedy Wunderground, que constantemente produce a bandas que comienzan a ganar notoriedad en el circuito art rock y post punk principalmente londinense. Además, es el productor de discos que son fundamentales para esta nueva generación europea, como Schlagenheim (2019), de Black Midi y la trilogía inicial de la discografía de Fontaines D.C.: Dogrel (2019), A Hero’s Death (2020) y Skinty Fia (2022). 

Con Squid produjo los dos álbumes previos de la banda. Más allá de que para Cowards decidieron trabajar con la productora italiana Marta Salogni, Dan no dejó de estar involucrado como una especie de guía constante para la banda.

Foto: Caroline Safran 

Foto: Caroline Safran 

“Dan estuvo para la producción adicional, que hizo de forma remota. Mientras estábamos de gira en los EE.UU., Dan estaba trabajando en su producción adicional. Cuando comenzó, aún no había escuchado la música en detalle, así que fue como si escuchara estas canciones por primera vez. Recibíamos sorpresas y comentarios diarios de Dan. Él es un músico realmente entusiasta, es muy bueno mediando muchas de nuestras ideas y notando cosas que sabemos que solo él notará, tiene un carácter sonoro muy interesante y único en la forma en que ejecuta las ideas que están en su cabeza. Creo que mucho de lo que lo hace es especial porque puede dedicarse a tipos diferentes de música”, cuenta Louis.

Este año arranca de manera desafiante con el lanzamiento de su tercer álbum de estudio y una gira que comienza el 17 de febrero en Liverpool. Borlase lo describe como "emocionante", sobre todo porque será la primera vez que giren con un músico que tocará en varios shows, y no solamente en uno. Se trata de Rosa Brook, integrante de Pozi, una banda del Reino Unido.

“Rosa hizo muchas de las voces adicionales en el álbum y se unirá a nosotros en el escenario para cantar y tocar el violín, así que es muy emocionante tener a alguien que ha contribuido tanto a nuestra grabación de estudio para ver cómo puede traer un nuevo tipo de frescura a nuestro set en vivo. Es darle la bienvenida a alguien a la familia y dejarle tener su espacio como músico para llevar la música a un lugar donde no ha estado antes”, adelanta.

Foto: Harrison Fishman

Foto: Harrison Fishman

Después de pasar por muchas ciudades inglesas entre las cuales se encuentran Manchester, Newcastle, Brighton o Bristol, el primer tramo de la gira finaliza el 26 de abril, en una de las salas más importantes de Londres: Roundhouse, ubicada en Candem. Es un hito inédito para la agrupación, y según Louis, ha visto "muchas bandas geniales" tocando allí.

Además, el 7 de junio serán parte de una edición histórica del Primavera Sound Barcelona, compartiendo jornada con bandas con las que crecieron a la par, como Black Country, New Road y Fontaines D.C.

“Cuando fuimos a Argentina, Chile y Brasil fue una de las giras más increíbles para nosotros. Simplemente es increíble ir a esa parte del mundo y ver esas hermosas culturas, todo se siente tan único en América Latina. Realmente queremos volver y con suerte este año, o en 2026, podremos hacerlo”, concluye, y siembra una fuente de esperanza para aquellos que se quedaron con ganas de verlos, o ansían volver a tenerlos en un escenario local.

Por María Road