La historia es sencilla. Un día de 2017 Luis Fonsi despertó y en su cabeza sonaba lo que luego sería un hit mundial. Tuvo que investigar si ese “Des-pa-cito” que se repetía ya existía, si lo había escuchado antes. Lo grabó en el estudio de su casa, le gustó la simpleza. Antes de su primer café del día había compuesto el coro principal.

Ese día Fonsi también tenía una sesión de escritura con su amiga y cantautora Erika Ender. Él le cantó ese coro que había grabado unas horas antes y ella lo entendió al segundo, según recordó Fonsi en entrevista con Billboard.

Después cuentos conocidos: American Music Awards, Grammys Latinos, Teen Choice Awards, Billboards Latinos, NRJ Music Awards, los 40 Music Awards, Premios Juventud, Premios Quiero 2017, MTV Millennial Awards.

Además, por “Despacito”, Luis Fonsi ganó siete récords Guinness: por ser la canción con mayor número de semanas consecutivas —17— en el primer lugar de la lista Hot 100 de Billboard; por llegar a las 5.000 millones de visualizaciones en YouTube; por ser el videoclip de música más visto de internet y el más reproducido de un dúo —con Daddy Yankee—; por ser el video “más gustado” de internet; por estar el mayor número de semanas en el primer puesto de la lista Billboard Hot Latin Songs y por ser la canción que más se escuchó en el mundo.

Pero también, el tema que interpretan Luis Fonsi y Daddy Yankee fue un borrón en la barrera del lenguaje entre el resto del mundo y la música latina. Si bien Fonsi dice que antes de él estuvieron Gloria Estefan, Luis y Enrique Iglesias, Shakira, José Feliciano o Ricky Martin, es cierto que con “Despacito” hubo un antes y un después en la música latina: se abrieron puertas.

Al hit de Fonsi lo cantan en inglés —con Justin Bieber—, en alemán, en italiano, en polaco. Al puertorriqueño lo llaman para que colabore con artistas de todo el globo: de Medio Oriente, Francia, Italia, Alemania. Él dice que estas invitaciones son “algo que viene gracias al éxito de ‘Despacito’, pero no tan solo eso, sino al éxito de la música latina en el mundo entero”.

Es que con este hit se terminó de consolidar lo que ya se venía dando, personas de diferentes culturas e idiomas se sienten más cómodas disfrutando de la música en español, con “ese sabor latino”.

Este 9 de junio, cinco años después de aquella mañana en la que se despertó con una canción que cambiaría las cosas, Luis Fonsi vuelve a Uruguay en busca de “una noche perfecta”. En un viaje sinfín de mucho baile, de mucho romanticismo y energía se presenta en el Antel Arena.

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—Has pasado varias veces por Uruguay, ¿qué es lo que más disfrutas de este público?

—Me encanta Uruguay, la gente, la energía de las personas. Me emociona que me hayan dado la oportunidad de presentarme. De hecho, es el próximo show que tenemos, así que llegamos con toda la energía de este comienzo de la gira que inició el fin de semana pasado. Con ganas de pasarla bien, de tener o tratar de vivir una noche perfecta, así como se llama la gira.

—¿Qué puede esperar el público será el show?

—Es un espectáculo muy variado. Hay temas muy rítmicos, muy románticos, cosas nuevas, canciones de mis primeras producciones. Es como un viaje sinfín de mucho baile, de mucho romanticismo y energía. Empezamos la gira en Puerto Rico y fue increíble, me lo gocé. Es un show muy dinámico y estoy loco por pisar ese escenario en Montevideo.

—¿Cómo viviste el lanzamiento de tu último disco Ley de Gravedad?

—Bien. Es un disco muy variado, así como el show. Un disco que se hizo en pandemia, así que fue un reto hacerlo. Pero la verdad me lo gocé al máximo. Han salido muchas canciones de este disco, estaremos presentando gran parte sobre el escenario.

—En 2017 creaste una canción que se convirtió en un hit mundial, "Despacito". ¿Cómo ha sido tu carrera musical luego de ese suceso?

—Bien, increíble. Se abrieron muchas puertas. No tan solo para mí, sino para la música latina en el mundo entero. La gente está disfrutando de nuestro género. He podido crecer y colaborar y hacer muchísimas canciones con artistas de diferentes partes del mundo. Que es algo que he disfrutado mucho, con artistas importantes de Italia, de Francia, de Alemania. Mañana filmo un videoclip con un artista importante de Medio Oriente. Ese tipo de colaboraciones es algo que viene gracias al éxito de "Despacito", pero no tan solo eso, sino al éxito de la música latina en el mundo entero.

—Rompiste la barrera del idioma, de alguna manera

—Sí, fue importante borrar un poquito esa barrera del idioma. No sé si la rompí yo. No quiero sentarme aquí a tomarme todo el crédito de que yo lo hice. Antes de mí vinieron muchísimos artistas latinos que hicieron cosas importantísimas a nivel mundial: Gloria Stefan, José Feliciano, Julio Iglesias, Enrique [Iglesias], Ricky [Martin], Shakira. No puedo decir que yo hice más de lo que hicieron ellos, pero sí pienso que la canción jugó un papel muy importante en terminar de romper esa barrera. Gente de diferentes culturas, idiomas, se sienten más cómodas disfrutando de la música en castellano, en español, con ese sabor latino. Creo que sí marcó un antes y un después.

—Además de hacer música, participas en campañas sociales, ¿cómo llegaste a este camino?

—Yo creo que no es una cosa que uno dice "quiero llegar aquí", es como que el corazón te pide ayudar. Por suerte tengo una plataforma donde la gente me escucha y si yo puedo recaudar fondos para ayudar a alguien, una asociación o a un grupo de gente haciéndolo a través de mis canciones, es algo muy importante y poderoso. A lo largo de los años me he unido a campañas y fundaciones importantes. Me llena mucho hacer la diferencia y poder salvar vidas como hago con hospital St. Jude de cáncer. También con mi propia fundación donde ayudo a las escuelas públicas con sus programas de música en Puerto Rico y poder entregarle instrumentos a los niños que no tienen nada, pero que quieren hacer música. Eso me llena. Creo que es una faceta muy importante de mi carrera también.

—¿Algo que le quieras decir a las personas de Uruguay?

—Estoy super ansioso de regresar a Uruguay. Les prometo que lo voy a dejar todo sobre el escenario de Montevideo. Estoy loco por verlos.