Por Pancho Pastori de Casa Arbus | @casaarbus

Majo Casacó nació en Cuba en 1993, pero desde los 11 años vive en Uruguay. Cuando la escuchás hablar no hay una tonalidad fuerte que dé pistas de sus raíces caribeñas, pero su alegría y su luz dejan en evidencia que hay algo de allá.

Su creatividad es inquieta y variada. Como fotógrafa, siempre está explorando diferentes técnicas tanto en lo analógico como en lo digital, pero además es profesora en una carrera de diseño y producción, y bailarina.

La fotografía de moda es su especialidad profesional, pero analiza y cuestiona ese mundo en sus proyectos autorales, como en “Life in Plastic”, que sigue en proceso, pero fue expuesto en Casa Arbus hace un tiempo. Tiene una gran atracción hacia los maniquíes, lo que a mi forma de ver tiene mucho que ver con ese amor y cuestionamiento hacia la industria de la moda.

Es honesta y autocrítica. Juega con la idea de aceptarse superficial, pero lo hace con una cantidad de reflexiones que la excluyen automáticamente de eso, sin dejar de crear sus imágenes con un sentido estético que le es inseparable.

Hablar con Majo siempre es un placer. Le gusta mucho hablar, por lo que lamento un poco que esta nota sea escrita. Espero que tengan la suerte de encontrarla en algún lugar para poder cruzar unas palabras con ella, seguro la adorarán al instante. 

Foto: Majo Casacó

¿Cómo empezaste en la fotografía y qué te inspiró a seguir este camino?

Podría decir que siempre estuve interesada en la imagen. Tengo el recuerdo muy vívido de visitar la casa de algún vecino y pedirle que me enseñará sus fotografías familiares. 

De todas formas, el momento decisivo fue una cámara que me regalaron en mi cumpleaños de 15. Era digital, de color naranja, con una memoria interna de 59 fotografías. Aún la tengo, pero ya no funciona. 

Lo que me inspiró a seguir este camino fue que mis fotografías de 15 son espantosas. Muy muy feas. Igual, hoy en día estarían en tendencia.

No era lo que yo me había imaginado, no hubo amor en la imagen y me enojé tanto que decidí "darle al mundo" un mejor servicio. 

Creo que mis palabras exactas fueron: "nadie se merece tan malas fotos de momentos tan únicos".

¿Cómo definirías tu estilo fotográfico y por qué?

Barroco kitsch caribeño.

Porque tengo un gran sentido del humor y mi mayor referente es Almodóvar.

¿Cómo elegís tus sujetos o temas?

La respuesta sencilla sería: "no lo sé". Pero, si soy realmente honesta, la respuesta es otra. 

Estoy todo el tiempo tratando de retratar lo que me resulta atractivo del mundo externo y cómo eso se refleja en mi mundo interno, ¿tiene sentido? Voy de nuevo.

Quiero encontrar en el afuera lo que para mí es interesante, lo que me genera la respuesta animal de querer capturarlo. No logro entender por qué es interesante, es una pulsión, un acto involuntario de placer. 

(Por mucho tiempo lo generaba de forma automática, solo parando en la edición a darme cuenta lo que había registrado. Hoy en día trato de estar más presente cuando capturo una imagen).

La frase que me define sería: hago fotografía porque no me quiero olvidar de nada. 

El vínculo especial entre la imagen y la memoria. 

El atrapar el presente, congelarlo, y guardarlo en una caja. 

Que el tiempo no suceda. 

¿Cuál consideras que es tu proyecto/foto más significativa hasta ahora y por qué?

Mi proyecto más significativo hasta ahora es "Life in Plastic" porque es un proyecto que tiene pies y cabeza. Sigue vigente y, de hecho, pude concretarlo en dos piezas: una exposición y una revista. 

Foto: Majo Casacó

¿Cómo influyen tus experiencias personales en tu trabajo fotográfico?

No creo que mis experiencias personales influyan en mi trabajo de forma directa. Sí influyen mis gustos personales que, de hecho, se generaron a través de la experiencia.

Siempre estoy hablando de mí, pero desde una generalidad estética. Incluso los trabajos autorales, me gusta hablar del todo. 

Por ejemplo: Las Muchas Cosas es un proyecto autoral donde narro mi historia de vida a través de algo tan mundano como la parte de adentro de una caja de Garoto. 

Para mí, primero, está lo visual. Después, todo lo demás. Construyo el sentido y la narrativa a través de lo estético. 

Habrá quienes me llamarán superficial y les daré la razón. 

¿Qué fotógrafos/as o artistas influyen en tu trabajo?

Uf, un montón.

Rala Choi, Rineke Dijkstra, Marcos López, Édouard Levé, Gilies Lipovetsky, Paolo Roversi, Daniel Gordon, Jean-Honoré Fragonard, Johannes Vermeer, Andrey Remnev, Edward Hopper, Klaus Mitteldorf, Pater Sato, Deborah Turbeville, Pedro Almodóvar, Carlos Saura, The Hilton Brothers, William Eggleston, Egon Schiele, Georgia Okeeffe, Tony Kelly, Kazimir Malevich, to name a few. 

¿Cómo es tu proceso creativo, desde la idea hasta la captura final (o finalización del proyecto)?

Suelo estar sentada en un lugar mirando de forma intensa un punto en la pared, ensimismada en mi línea de pensamientos cuando de repente se activa algo que suele parecerse a una buena idea. 

Puedo anotarla, dibujarla o me envío una nota de voz al grupo de WhatsApp que tengo conmigo misma. 

La dejo en el tintero y me distraigo con alguna cosa en YouTube. Pasan algunas semanas, pero sosteniendo el pensamiento de la buena idea, en especial en un viaje de ómnibus. 

En algún momento comienzo a buscar referencias en Pinterest y escribo textos de forma automática. 

Si decido perseguir la idea, armo un moodboard, sigo escribiendo y buscando referencias. 

En el medio trabajo, duermo, como y tomo agua.  

Pueden pasar meses. 

En "Life in Plastic" demoré casi 4 años para entender qué era lo que estaba tratando de hacer y luego fueron 2 años de proceso. Cuando estuve clara, todo fluyó de forma acelerada. 

Entonces:

Idea que detona un interés, reposo y análisis de la misma, bajada visual, armado de moodboard o brief, escritura automática, detalles técnicos, sesión de fotos, post producción digital, post producción manual (collage u otro tipo de intervención) y formato final.

Además, durante todo el proceso, pido opiniones a terceros. 

Foto: Majo Casacó

¿Cómo manejás los desafíos técnicos o creativos en tus proyectos/fotos?

Los desafíos técnicos: soy muy mala técnicamente. 

Soy desprolija, no comprendo mucho, siempre ando preguntando y pidiendo ayuda (que no está mal).

Soy una persona que precisa una guía para aprender sobre cuestiones técnicas, desde esquemas de luz hasta Photoshop. 

No soy autodidacta. 

Los desafíos creativos: no veo la creatividad como un desafío sino como algo que hay que experimentar. Hay que vivir la "no creatividad", la poca inspiración, los momentos de calma y los momentos de explosión creativa. 

Hay que saber NO crear en la inspiración, dormir 8 horas y tomar agua. 

Siempre digo: equivocarme en el arte, a diferencia que en la vida, me genera una risa incontrolable.

Más allá de lo que hagas habitualmente, ¿preferís trabajar con luz natural o artificial y por qué?

Yo soy fan de la luz artificial. El flash directo, las luces del shopping, las leds, las luces de colores. 

Porque todo lo que sea artificio me resulta más interesante, más impactante. Es trabajar con la huella humana en todo. 

Además de que me cuesta mucho exponer la luz natural. 

Mis mayores respetos a quienes son hábiles con la luz natural.

¿Cómo seleccionás las imágenes que exhibís o que forman parte de un proyecto?

Siempre pido opinión de terceros. 

 Y confío mucho en un impulso físico que me genera entusiasmo y sudor.

¿Qué equipo fotográfico es esencial para vos y por qué?

Iba a decir cualquier tipo de cámara, pero siento que es una respuesta tonta.

Entonces diré: el flash de cámara.

Me conmueve el tipo de fotografías que logro con el flash de cámara.

¿Cómo ves el futuro de la imagen en tiempos de inteligencia artificial?

La IA es una herramienta increíble, es un gran avance tecnológico. 

Sé que tiene sus controversias, pero eso siempre sucede esto con lo nuevo.

Lo único que podría decir es que las imágenes AI son MUY AI. Es decir, tienen su estética y sus patrones visuales, que no es algo particularmente malo, simplemente son las formas de un nuevo lenguaje que se manifiesta. 

La imagen no depende de la imagen en sí, depende de quién esté detrás de su creación. Es herramienta valiosa para crear mundos imposibles y genera nuevas formas de expresión, como también lo sigue generando la fotografía clásica. 

Igual yo soy de la idea de que, cuanto más avanza el mundo, más hacia adentro miro.

Foto: Majo Casacó

¿Qué foto icónica de la historia te hubiera gustado hacer a vos?

Alguna fotografía de Eggleston o de Guy Bourdin.

¿Cómo consideras que la fotografía puede influir en la cultura y la sociedad?

"(...) Adoptar una imagen equivale siempre a reconocer de manera pública un valor simbólico, hacer profesión de una actitud hacia el prójimo. Supone, de alguna forma, dar un carácter oficial y visible a la lectura que alguien hace de aquel mensaje icónico (...)", Joan Fontcuberta.

La imagen no es la verdad, pero sí entra en el terreno de lo posible, vivimos en sociedades donde muchos de sus juicios se basan en imágenes. 

Deviene también de la idea que siempre los ojos serán mejores testigos que los oídos, pero, ¿cómo saber si las cosas son reales? 

Hoy en día pensar que la imagen es la realidad es muy ingenuo y más aún en un mundo que no para de producir contenido visual alterado, distorsionado, filtrado, editado, de inteligencia artificial, etc. 

La imagen crea iconos y desgracias por partes iguales. Crea conceptos y metáforas. Crea distorsiones y memes. 

Puede influir el rumbo de una elección y el control de la narrativa en una guerra. 

La imagen es propagandística. La imagen es el recorte voluntario o involuntario de quien la toma. 

Hay solo un cambio de encuadre entre una foto feliz y una foto triste.  

Foto: Majo Casacó

¿Cómo influyó la fotografía en tu vida?

Todo lo entiendo a través de la fotografía, de lo visual, de la estética. 

No concibo mi existencia sin una cámara. Concibo los recuerdos como imágenes. 

Influye en la forma que entiendo la memoria, en su clasificación y organización. 

Cada suceso tiene su registro y por ende su carpeta con fecha y descripción. 

¿Tenés algún proyecto futuro o meta que te gustaría alcanzar en la fotografía?

Me encantaría tener mi propio estudio, mas sería un estudio híbrido con taller, un espacio más modelable a distintas operativas: workshops, talleres, pintar, bailar y hacer fotos. 

Otra meta sería editar mi primer fotolibro. 

¿Que foto te queda aún por sacar?

No lo sé, no pienso en eso, espero que la vida me atraviese forma violenta y visceral y me plantee una situación demasiado hermosa como para ignorar.