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Un festival que busca generar lazos: Festival Isoca, de El Plan de la Mariposa

En un bosque argentino, entre carpas, talleres y música, la banda busca conectar a las personas. De Uruguay van Mocchi y Benteveo.

24.01.2023 14:37

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2023-01-24T14:37:00-03:00
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Por Agustina Lombardi

Primero fueron cinco hermanos que vivieron su infancia en una ciudad abierta al mar; arena y naturaleza en Necochea, que está a casi seis horas al sur de la ciudad de Buenos Aires. Después extendieron la familia a una banda, a la que se sumaron un par más. Hoy son siete. Al conjunto de voces, guitarras, violín, teclado, acordeón, bajo y batería le llamaron El Plan de la Mariposa, una banda de rock argentina, que pasa por la psicodelia y el folk, por encasillarlos en algún género. Además de componer y tocar, produjeron y diseñaron las tapas de sus discos, armaron una sala de ensayo y reconstruyeron un bus con el que se fueron de gira por Argentina, Brasil y Uruguay. Con una velocidad máxima de 85 kilómetros por hora, cocina, baño, cuchetas y espacio para 14 personas, transportaron su música mientras ahorraban en hoteles y traslados. Filmaron el viaje. Hicieron un documental en el que Sebastián Andersen —el mayor de los hermanos— recuerda que, antes de girar en la casa móvil a la que llamaron Isoca, “sentía que El Plan de la Mariposa tenía mucho potencial, muchas ganas de expandirse y le estaba faltando realizar algo imposible para que esa mística creciera”. 

El próximo desafío fue producir su propio festival, no un festival cualquiera. 

En 2017 y 2018 volaron a Europa: “Tocamos en varios festivales alternativos y tenían una forma de hacerlos que era diferente a lo que veíamos acá”. La música de El Plan, que también tiene tintes nórdicos que los Andersen heredaron en su apellido, pasó por Alemania, República Checa, Dinamarca y Holanda, cuenta Sebastián y, en uno de esos festivales “flashearon” con la dinámica de organización: “Tenía su propia moneda interna, talleres, varios escenarios al mismo tiempo, muchas actividades culturales, artísticas y de formación”. Se nutrieron y volvieron motivados por ver cómo se podía compartir la música. 

“Lo decidimos volviendo de esa gira, hicimos la primera edición al toque”. En febrero de 2019, en algún terreno en Necochea se desplegó el primer Festival Isoca. La tercera edición tendrá a Mocchi y Benteveo de Uruguay y será el 27, 28 y 29 de enero en San Cayetano.

Las personas se reunirán en un bosque “bien alejado, metido tierra adentro donde se genera un ambiente de intimidad y de contacto con la naturaleza”, cuenta Sebastián desde el terreno, que espera a llenarse de personas acampando, intercambiando en talleres y escuchando música en vivo. 

Sebastián lo define así: “Es un festival de arte y música en la naturaleza donde la idea es convivir tres días y tener una experiencia que sea reveladora y que, a cada uno, le sirva para profundizar en su persona y en los vínculos. Un espacio para conocer gente, expandirse, aprender y compartir. Especialmente compartir: es parte de la esencia fundamental y algo muy importante que nos enriquece como seres humanos”.

Foto: Festival Isoca.

Foto: Festival Isoca.

El Plan de la Mariposa tiene una visión, un modo de ver el mundo, que se refleja en lo que hacen y cómo lo hacen. Desde el nombre de sus canciones, como “La vida cura”, “Revoluciones casera”, “El cuerpo sabe”, “Romance con el desapego”, hasta la gestión de un festival que busca que “se generen lazos” y, de ese intercambio, “salir fortalecido”. “No es lo mismo ir a una fecha de cualquier banda dos o tres horas, en la que, por ahí, sí conocés a alguna persona, que convivir durante tres días. Quedarte dos noches genera otra profundidad en las relaciones”, dice Sebastián. 

“Lo hacemos por el placer de hacer, que también es parte de la identidad del Plan, siempre hicimos muchas cosas”, concluye.

Foto: Festival Isoca.

Foto: Festival Isoca.

Por Agustina Lombardi