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Música
Mate y cumbia

Virgen Negra, la cumbia colombiana de Valdivia, la ciudad que habita la lluvia y los ríos

Los chilenos se estarán presentando este jueves 11 de abril en La Cretina y traerán un género esencialmente latino al Río de La Plata.

10.04.2024 15:31

Lectura: 7'

2024-04-10T15:31:00-03:00
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Por Federica Bordaberry

La virgen negra: un elemento del culto popular cristiano. Las teorías de dónde vienen, son muchísimas. Que algunas vírgenes se hacían con madera, que otras las quemaban, que se arruinaban con el paso de los años y adquirían ese color, que el colonialismo generó figuras mixtas entre lo europeo y lo indígena. 

La cumbia colombiana: un ritmo originario de Colombia, folklore. Es música, pero también es baile y, quizá, la zona que más represente de ese país es a la región costera. Los bailes son en pareja, sin tocarse. Es cotejar, seducir, buscar, declarar. El origen es la conquista amorosa. 

En el verano del 2017, ese nombre, "virgen negra", comenzó a escribirse con mayúsculas para algunos. Pasó a ser Virgen Negra, una banda oriunda de Valdivia, Chile. Un país que también tiene su propia cumbia, su propio folklore. "Desde que somos chicos nuestros papás la escucharon. La escucharon nuestros abuelos y está insertada en el ADN de los años 50, 60. Es, finalmente, parte de la fiesta latina", dice Aníbal Pino, uno de los fundadores de la banda, para explicar por qué un grupo de chilenos toca folklore colombiano en entrevista con LatidoBEAT.

Cultivan, así, ritmos de la costa y caribe colombiano. Van creando, recopilando e interpretando canciones de variados y destacados autores del género, dándole un sonido nostálgico a cada canción que interpretan. Se caracterizan, además, por la alta cantidad de instrumentos y sonoridades presentes en su show, haciendo "el viaje por la cumbia”. 

Este próximo jueves 11 de abril, Virgen Negra se estará presentando por primera vez en Uruguay. Las entradas pueden adquirirse contactando a La Cretina, que será el espacio donde realizarán el show. 


Virgen Negra es una banda de Valdivia y, sin embargo, toca cumbia colombiana. ¿Por qué?

Tocamos cumbia colombiana porque en gran parte del continente la cumbia ha sido un sonido, un himno, que ha sido parte de la fiesta. Desde que somos chicos nuestros papás la escucharon. La escucharon nuestros abuelos y está insertada en el ADN de los años 50, 60. Es, finalmente, parte de la fiesta latina. Tocamos cumbia porque es un sonido que es sencillo, pero es envolvente y tiene que estar presente en cada fiesta. 

¿Qué es la cumbia colombiana, no solo a nivel técnico o sonoro, sino en espíritu?

En espíritu, para mí, y yo creo que para gran parte de la banda, la cumbia viene con un espíritu fundado en algo étnico, en compartir, en que la gente haga un ruedo, de algo donde todos participan. Es algo que no es bien complejo. No es algo que se lea en una partitura, no es algo que se tenga que estudiar mucho tiempo. Si bien tiene notas básicas, tiene cantos repetitivos y eso lo hace que sea bien democrático en el sentido de que lo puede interpretar, o lo puede bailar, alguien que no se dedicó a tomar clases de baile o sencillamente a estudiar notas. Entonces, en espíritu es algo sencillo, algo ritualesco, como fácil de digerir. 

¿Qué tiene en común y en qué se diferencia con la cumbia chilena?

La cumbia colombiana, a diferencia de la chilena, es más cadenciosa. Se caracteriza por estar en notas menores y por tocarse más lentas.

He leído que tienen un formato tan tradicional como moderno, ¿en qué se encuentra lo moderno y en qué lo tradicional?

Lo tradicional se centra en que es sonido de gaita, tambor alegre, llamador, que son los instrumentos tradicionales de la cumbia más afrodescendiente. Y lo más moderno es la cumbia que está volcada a los instrumentos de bronce, instrumentos mucho más modernos, percusiones tal como la timbalera, platillos, teclado, a veces guitarra eléctrica y bajo eléctrico.  

Se presentan en formato orquestal con varios instrumentos en escena como gaitas afrocolombianas, un acordeón diatónico, ¿cómo han aprendido un grupo de chilenos a tocar esos instrumentos tan colombianos?

Por separado. Como que gran parte de los integrantes ha tenido la inquietud de investigar este ritmo. Se han enamorado un poco de este ritmo y, en su gran mayoría, se han dedicado a viajar, a estudiar estos instrumentos. Gran parte a viajado a Colombia. También hay una integrante que es colombiana y ha sido como una investigación de cada uno en torno al instrumento y al estilo, a permearse de esto principalmente en Colombia. 

Hay varios estilos de cumbia colombiana, desde la cartaginesa hasta la sampuesana, la soledeña, que va variando por región. Es decir, hablar de cumbia colombiana ayuda a enmarcar un género, pero cada región ha aportado lo suyo. ¿Qué ha aportado a la cumbia colombiana que ustedes hacen, el ser de Chile, o la región geográfica de la que vienen?

Lo que ha aportado es que nuestro sonido y nuestra investigación ha hecho rejuvenecer este sonido de cumbia tradicional y ha llevado a situarlo nuevamente, a reposicionarlo, a rejuvenecerlo, a maquillarlo en lo que nosotros hacemos también para la gente.

Como en todos los géneros folklóricos, la geografía juega mucho. Si en Colombia lo que está cerca es el Caribe, en Chile lo es el Pacífico, que son distintos en color y en temperatura. ¿Qué vínculo tienen con el agua que los rodea?

Valdivia fue un lugar repleto de agua por todas partes. Es el lugar donde más precipitaciones hay en todo Chile y, en lo personal, puedo hablar que lo que uno haga en Valdivia siempre va a estar rodeado de agua. Siempre está cayendo agua del cielo, siempre está todo mojado, todo húmedo. Están los ríos, el mar cerca, lagos. Habitamos el agua, sencillamente. "La región de los ríos" se llama donde vivimos. 

Lo mismo sucede con el baile. La cumbia colombiana se baila, históricamente siendo un juego de seducción, ¿cómo hacen para mantener eso en un escenario, siendo un género que originalmente se tocaba más bien en los bailes, o en la calle, al ras del suelo?

Creo que la cumbia que hacemos es bien transe. Cómo lo hacemos... un choque totalmente energético que no deja caer el pulso nunca, que no da descanso, no da tregua. Tiene un principio y un fin detonante. Como un libro que tiene principio, desenlace y final, se queda todo el tiempo arriba. 

Virgen Negra tiene un EP, que se llama La patrona del mambo, ¿qué reúne ese EP? ¿Qué muestra?

Reúne el viaje de la cumbia. Desde lo más tradicional hasta la cumbia que la sobresigue, que es la cumbia acordeonera, hasta la cumbia más orquestal. El viaje completo de la cumbia. 

Están saliendo de gira para Uruguay y Argentina, una gira a la que llamaron “mate y cumbia”, ¿qué recepción esperan de una muestra de cumbia colombiana? 

Creo que tenemos una preconcepción que Argentina, al igual que Chile o al igual que Perú, son amantes de la cumbia y creemos que va a tener muy buena recepción nuestra cumbia. Y esperamos abrir espacio, hacer amistades, poder sentir la energía de la gente y poder nutrirnos de ella. 

Teniendo en cuenta que la virgen negra es un fenómeno cultural y social para los latinos, sobre todo vinculado a un colonialismo, ¿por qué Virgen Negra como nombre?

Si bien hay un colonialismo, sentimos que la Virgen negra es una manera de transculturación, pero tambien es una forma de unir a estas tres culturas porque es lo afro, es la cultura indígena, que es la que nos representó siempre, y esta llegada del europeo, que llegó a mezclarse. La cumbia también es parte de eso, de una transculturación, así que sentimos que la virgen negra en grandeza igual es el sentimiento indígena y afro. También tomando esa imagen que viene de Europa, pero realmente haciéndola latina, poniéndole el indigenismo.

Por Federica Bordaberry